Como bien sabemos, el ejercicio profesional va y viene entre experiencias y avatares; en ese encuentro a diario con el paciente se pone en juego no solo un saber disciplinar, también la relación con él y su dolencia.
En esta vía, ir más allá de la actividad médica requiere de un propósito o una intención que permita sostenernos a través del tiempo y dé sentido al hacer.
La importancia del propósito, tanto en la vida propia como en la profesional, remite a la posibilidad de encontrar en tu mundo interior esa motivación para conectar con lo que verdaderamente deseas, de esta manera no te faltará el asombro y el aprendizaje frente a cada vivencia.
Si eso que deseas va en función del servicio y ayuda al otro, alentar a diario el compromiso con el paciente y su bienestar, supone de unas habilidades importantes que deben acompañar dicho proceso (empatía, comunicación asertiva, escucha); además de la flexibilidad y apertura para comprender otros
puntos de vista.
Centrarse en un propósito claro y conciso resalta el valor que tiene el cuidarse para cuidar de otros, entender y atender tus necesidades para conectar con las de tu paciente, de no ser así no existiría coherencia y equilibrio entre el discurso y el acto.
Por ello, prestar atención al efecto que trae a tu vida y entorno el propósito de la profesión, no solo estimula la pasión, dedicación y esmero, también te llenará de razones para seguir eligiendo cada mañana desde el SER el hacer.
Dr. William H Joaquí
MD. Especialista en Anestesiología
MD. Especialista en Medicina del Dolor
Ms. en Manejo Avanzado del Dolor
Profesor de Mindfulness y Compasión para la salud y el estrés (MBPM)
Medicina Integrativa-Medicina Funcional
Cofundador de Cuerpo&Mente
williamjoaqui@cuerpoymente.com.co